Esta es una historia de violencia. Odiseo Ruiz vive solo, ha huido de la ciudad a un pequeño pueblo marinero, no puede salir de casa, no puede hablar con nadie, no puede bajar por las escaleras a la planta baja, no puede salir de su cuarto, ¿por qué? Odiseo Ruiz observa atemorizado desde la ventana de su casa el camino de tierra polvoriento y el campo de trigo abandonado. A veces vienen niños de unos once años al campo de trigo a tirarse piedras. Odiseo se agacha bajo la ventana cuando los ve aparecer, como si presintiera la tragedia que estos niños van a desencadenar. Nosotros seremos testigos de ello, testigos de esta historia de violencia. “Toda la vida consiste en resistir…”
La noche grita
